Bolivia, es uno de los países de Latinoamérica que no cuenta con una ley de protección de datos. Ante esta carencia, las vulneraciones a la protección de datos continúan pasando, mientras las nuevas tecnologías avanzan a grandes pasos. Bajo este escenario, la Fundación InternetBolivia.org organizó la serie de eventos “Construyendo una cultura de privacidad: En busca de un marco regulatorio para la protección de datos en Bolivia” en los que más de 400 participantes de la sociedad civil y diversas organizaciones compartieron información y debatieron sobre la urgencia de esta normativa.
Faltaba media hora para que empiece el evento, cuando el encargado del salón se me acercó. ¿Usted es la organizadora? ¿Me dejaría su carnet por favor? Victoriosa, respondí que no, que había olvidado la billetera (y era cierto). Cada vez que me piden mi carnet de identidad para ingresar a una institución pública o un edificio particular, siento que pierdo algo. Luego, temo irme del lugar y olvidar el carnet (que luego será expuesto en una vitrina de “extraviados”). Esta es sólo una situación de las múltiples que vivimos como bolivianas y bolivianos, sin una ley de protección de datos.
Detectar estas realidades y los peligros que pueden significar para nuestra seguridad personal, es el primer paso para entender la urgencia de esta ley. A través de la serie de eventos “Construyendo una cultura de privacidad: En busca de un marco regulatorio para la protección de datos en Bolivia”, la Fundación InternetBolivia.org junto a sus aliados, llegó a 465 participantes para conversar sobre las consecuencias de la ausencia de una ley que proteja datos. Los seminarios y talleres se realizaron en las ciudades de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz entre el 13 y 17 de mayo.
¿Por qué una ley de datos?
“Estamos viviendo grandes avances tecnológicos en los que empresas, gobiernos y todo tipo de entidades están manejando información y también se están dando casos de ciberdelitos. En ese contexto, es que necesitamos discutir, por qué necesitamos una ley de protección de datos personales, qué tipo de estándares y qué tipo de derechos tiene que incluir”, apuntó el director de la Fundación InternetBolivia.org, Cristian León. Añadió que la propuesta de ley debe ser representativa, recabando aportes de la ciudadanía. Sobre ese punto, la especialista de protección de Datos de InternetBolivia.org Nicole Sánchez, recalcó que la ciudadanía boliviana continua cediendo sus datos personales en diversas circunstancias y más aún con los avances tecnológicos. “Nosotros cuando vamos a cualquier tipo de entidad pública o privada, de una u otra manera estamos cediendo nuestros datos y la mayoría de las veces sin siquiera saber cómo estos van a ser utilizados o si en algún momento estos podrían ser vulnerados e ir contra otros derechos, por lo cual nosotros tenemos que aprender a proteger nuestros datos de manera autónoma, pero también tenemos que luchar por una ley de protección de datos a nivel nacional”, precisó. Acotó que la discusión sobre los grandes avances tecnológicos como aplicaciones de la Inteligencia Artificial debe darse junto al debate sobre protección de datos. En tanto, la docente de la Universidad Mayor de San Andres (UMSA), Karina Medinaceli, detalló los antecedentes y avances en Latinoamérica en materia de protección de datos. Chile fue pionero, al sacar su Ley de Protección de Datos en 1999, hace casi 25 años. Un hecho que muestra la urgencia de acelerar esta normativa en Bolivia.
¿Qué permitirá una ley de protección de datos?
Con el fin de explicar la situación de Bolivia en Protección de Datos y Ciberdelitos se realizó una taller con legisladores nacionales apoyado por la senadora Silvia Salame. A lo largo del taller se visibilizó que al no tener una ley de protección de datos se dificultan las políticas de gobierno electrónico y modernización de sistemas estatales de información. La Coordinadora de Políticas Públicas de la ONG internacional Derechos Digitales, Lucia Camacho, mencionó que avanzar en la regulación de protección de datos “es el primer paso para construir otras políticas públicas en materia de seguridad digital y soberanía digital”. Precisó que la regulación de los ciberdelitos es la vía reactiva, pero que también se precisa, de una vía preventiva que incluya normativa sobre protección de datos y ciberseguridad.
Diego Poppe, en representación de DAMA (Data Management Association) Bolivia, destacó que la falta de una normativa de protección de datos también compete al sector privado. Explicó que el tratamiento de datos se da en diferentes niveles, desde el procesamiento de datos tradicional, el big data, data mining o machine learning. Sin embargo, menciona que todos estos tienen un punto en común: la necesidad de un adecuado gobierno de datos. La ausencia de un marco normativo sobre el tratamiento de datos genera la pérdida de credibilidad y consecuencias económicas.
¿Cómo tratamos los datos?
Cuando respondiste una encuesta ¿te han dicho que harían con tus datos? Probablemente no, y es que en el país, no se dan protocolos sobre manejo de datos (en la mayoría de los casos). La Wikimedista de Bolivia, Olga Paredes, animó a que se informe a la población, sobre los usos de los datos que se les solicita y el tiempo que se los tendrá guardados. Además, dijo que los datos que se soliciten sean pertinentes, ya que en muchas ocasiones se pide más información de la que realmente se necesita aumentando los riesgos. Con una cultura más sólida sobre protección de datos, estos será mejor gestionados. Durante el conversatorio en Santa Cruz,el abogado especialista en derecho informatico de la firma Cervieri Monsuarez, David Oliva advirtió sobre cómo diversos servicios de streaming recopilan y comercializan datos. y los riesgos a los que nos exponemos al utilizar plataformas piratas.
Al respecto, el encargado de seguridad informática de la Fundación Internet Bolivia.org, Guillermo Movia, resaltó que hoy los datos, significan el “nuevo petroleo” con el que muchas empresas están lucrando. Cada persona es un conjunto de datos de diferentes tipos, todo lo que somos o hacemos se refleja en datos, La CEO de la plataforma legal STATUS, Mariana Aviles recordó a los asistentes que desde el lugar en el que trabajemos, es necesario reconocer los tipos de datos que recopilamos y la aplicación de tecnologías para la protección de documentos o bases de datos como blockchain.
Los especialistas Franco Giandana, Nicole Navia Ibacerna expusieron propuestas e información para retomar el camino hacia una regulación en materia de protección de datos.
El Secretario Municipal de Ciudad Digital y Gobierno Electrónico de la Alcaldia de Cochabamba, Andreé Canelas,relató las innovaciones que se están dando en este municipio y recalcó la necesidad de una correcta gobernanza de datos para implementar tecnologías que coadyuven en el desarrollo de la ciudad.
¿Desafíos?
El director de la Carrera de Derecho de la Universidad Privada Bolivia sede Cochabamba (UPB), Oscar Paredes, mencionó que entre los desafíos para implementar un marco normativo para la protección de datos, es integrar su vínculo con la propiedad intelectual, actualizar la ley de protección de datos y formular sanciones en el uso de inteligencia artificial que vulnere derechos humanos y digitales,
La ausencia de un marco normativo para la protección de datos, continúa vulnerando diversos derechos. El representante de ADESPROC Libertad, Favio Schuett evidenció que al no contar con una ley de protección de datos, los procesos y trámites de personas de la población LGBTIQ+ se dificultan.
Frente a este escenario, se dan múltiples desafíos. Por un lado, concientizar a la población sobre el valor y protección que deben tener sus datos, la urgencia de un marco normativo que los proteja y una cultura sólida de privacidad. Los esfuerzos por conseguir una ley de protección de datos deben continuar y así, lograr que toda innovación tecnológica vaya de la mano con los derechos humanos.